domingo, 17 de agosto de 2008

KUBRICK VERSUS SPIELBERG

Mi buen amigo Fernando Gahete es un dilecto kubrickiano. Como tal, adora sin reservas La naranja mecánica, y Barry Lyndon, y Senderos de gloria; y también (aunque no tanto) 2001. Hace unos días nos importunaba pendenciero a Óscar Córdoba y a mí (que profesamos la fe de Steven Spielberg), con la consabida monserga de que había gran distancia artística entre ambos. A favor del primero, naturalmente.

Tamaña osadía no podía quedar impune. De manera que ya está concertada la cita, el lugar, día y hora en que, cervezas en mano, dirimiremos esta contienda, esta singular ordalía. Para asentar nuestros respectivos argumentos con vistas a la confrontación definitiva (ya saben, "sólo puede quedar uno..."), he pensado trasladar a este blog un debate que, en realidad, cobró virulencia en todo el mundo tras el estreno de Inteligencia Artificial (Artificial Intelligence); como recordarán, historia de Kubrick que trasladó a la pantalla su compinche Spielberg. Les pido su opinión: ¿cuál es su preferido? ¿Y los títulos preferidos de uno y otro?

Sí, ya sé que es una controversia tramposa. O al menos así lo veo yo: se trata de cineastas diferentes, ambos brillantes, con películas grandiosas... pero a la postre diferentes. Sin embargo, además de ameno puede resultar enriquecedor comparar la ejecutoria de dos auténticos pesos pesados del cinematógrafo, y revisar así sus bondades y carencias. ¿Se animan?